Cisneros: Marta Acosta le tiene pavor a escuchar la voz del pueblo.
En un reciente enfrentamiento político en Costa Rica, la diputada oficialista Pilar Cisneros ha lanzado duras críticas hacia Marta Acosta, la Contralora General de la República. Según Cisneros, Acosta temería escuchar la voz del pueblo y estaría preocupada por perder el poder que, según ella, nunca le fue otorgado por la ley o la Constitución.
Un Conflicto de Poder
Cisneros ha afirmado que Marta Acosta, en su rol como Contralora, muestra un rechazo vehemente a cualquier cambio que pueda cuestionar su autoridad, insinuando que su oposición a la Ley Jaguar es una manifestación de este temor. La diputada sostiene que la Contraloría no tiene la potestad de interpretar las leyes o sustituir al gobierno activo, y que Acosta está aferrándose a una autoridad que no le pertenece según la legislación vigente.
Críticas a la Contraloría
La crítica de Cisneros se enmarca en un contexto de tensiones políticas en torno a la reforma de la Ley Jaguar. Este proyecto, propuesto por el presidente Rodrigo Chaves, ha sido objeto de controversia, en parte debido a las objeciones de la Contraloría, que ha manifestado preocupaciones sobre la posible erosión de sus competencias y el impacto en la fiscalización pública.
Cisneros acusa a Acosta de querer mantener un poder que, según ella, excede las competencias constitucionales de la Contraloría. La diputada sugiere que la oposición de Acosta a la reforma no se basa en preocupaciones legítimas sobre la fiscalización, sino en un intento de preservar una influencia que no le corresponde.
El Debate sobre la Ley Jaguar
La Ley Jaguar, que contempla un referéndum sobre varias reformas importantes, ha sido defendida por el Gobierno como un paso necesario para el desarrollo nacional. Sin embargo, la Contraloría ha señalado que la ley podría debilitar su capacidad para supervisar y fiscalizar adecuadamente los recursos públicos.
Pero muchos costarricense nos hacemos la pregunta, ¡Quién fiscaliza a la fiscalizadora?.
El conflicto se intensifica a medida que la Sala Constitucional debe decidir sobre la legalidad de la reforma, y la tensión entre los diferentes actores políticos continúa creciendo. Cisneros y otros miembros del oficialismo han argumentado que Acosta está actuando por interés personal y no por un compromiso genuino con la transparencia y la rendición de cuentas.
El enfrentamiento entre Pilar Cisneros y Marta Acosta refleja una profunda disputa sobre el equilibrio de poderes y las competencias de la Contraloría General. Mientras el país espera la resolución de la Sala Constitucional sobre la Ley Jaguar, el debate sobre la autoridad y el papel de la Contraloría sigue siendo un tema candente en la política costarricense.