“Elecciones en Venezuela: ¿Repetición de la Historia o un Nuevo Capítulo?”.
La situación política en Venezuela ha tomado un giro que muchos consideran familiar, mientras otros la ven como una oportunidad para un cambio real. Con el reciente proceso electoral en el país, las comparaciones con eventos pasados son inevitables, especialmente con la controversia que rodea la reelección del presidente Nicolás Maduro y el surgimiento de un nuevo líder opositor que reclama la victoria.
¿Un Deja Vu Político?
El propio Maduro no ha dudado en reconocer la similitud con el pasado, señalando que “esta película ya la hemos visto”. Hace cinco años, Juan Guaidó, entonces presidente del Parlamento, se proclamó presidente interino de Venezuela, desafiando la reelección de Maduro, que fue ampliamente cuestionada por la oposición y la comunidad internacional. Guaidó recibió el respaldo de varios países, incluidos Estados Unidos, que lo reconocieron como el legítimo jefe de Estado. Sin embargo, ese intento por desplazar a Maduro culminó en un fracaso, y Guaidó fue relegado al olvido, mientras Maduro se consolidaba en el poder.
Hoy, un nuevo candidato opositor, Edmundo González Urrutia, ha surgido en la escena política, desafiando una vez más la legitimidad de Maduro. Este último no ha dudado en etiquetar a González como “Guaidó 2.0”, sugiriendo que la historia se está repitiendo con los mismos actores y un guion similar.
Diferencias Cruciales en el Contexto Actual
A pesar de las aparentes similitudes, los analistas políticos subrayan que el contexto actual es distinto. Giulio Cellini, director de la consultoría política Logconsultancy, destaca que, a diferencia de la época de Guaidó, esta vez no se trata de que la comunidad internacional reconozca a un presidente paralelo. El enfoque ahora está en el resultado final de las elecciones presidenciales y en la legitimidad del proceso.
El Consejo Nacional Electoral (CNE) ratificó la victoria de Maduro con el 52% de los votos, pero sin publicar el recuento exacto ni las actas de las mesas electorales, atribuyendo esta omisión a un presunto hackeo informático. La oposición, por su parte, afirma que González ganó con el 67% de los votos y ha presentado actas que, según ellos, respaldan su victoria. Sin embargo, estas actas han sido rechazadas por Maduro, y la situación se encuentra en un estancamiento.
Una Lucha de Poder y Desgaste
El conflicto entre el gobierno de Maduro y la oposición ha sido descrito como una “colisión de trenes”. Mientras el gobierno se proclama vencedor sin demostrarlo, la oposición carece de los medios institucionales para probar su supuesta victoria, ya que el poder controla todas las instituciones del país.
El profesor Pedro Benítez advierte que lo que está ocurriendo en Venezuela es la consolidación de una dictadura militar al estilo de las que se vivieron en el Cono Sur durante los años 70. Según Benítez, la represión de los disturbios post-electorales ha dejado 24 muertos y 2,200 personas arrestadas, lo que refleja un endurecimiento del régimen.
Cellini añade que el poder en Venezuela se está volviendo cada vez más autoritario, y que la actual situación es el comienzo de una “guerra de desgaste”. Esta guerra enfrenta a un gobierno que cuenta con la fuerza y la desmovilización de la oposición, y a una oposición que depende tanto del apoyo popular como de la presión internacional para mantener viva su lucha.